¡Mucho ojo con los órganos homicidas!

La responsabilidad de los periodistas a la hora de informar suele ser mayúscula. Y en el caso de medios de comunicación masiva, como la televisión, conviene afinar mucho las antenas ante cualquier pronunciamiento, dado que el estropicio puede adquirir dimensiones colosales. Lamentablemente algunos colegas se distinguen por la estupidez de sus comentarios que sueltan sin el menor rubor y de los que no acostumbran a desdecirse. Es el caso de la presentadora de televisión española Mariló Montero que manifestó su preocupación por el hecho de que los órganos de un homicida sean trasplantados y con ellos viaje también el alma del asesino que acabaría maleando al receptor, ya que este posible contagio no ha sido refutado científicamente, según la inefable periodista que detecta impulsos criminales hasta en el hígado del pérfido donante. Lo verdaderamente preocupante es que alguien con estas entendederas tenga en sus manos audiencias millonarias y se empeñe en aleccionar a los teleespectadores con tamañas idioteces. 

El Mundo

Mariló Montero ha pedido disculpas "a todos aquellos que se hayan sentido ofendidos" por sus preguntas en el editorial de 'El programa a de la mañana' en el que se preguntaba: "¿Está bien donar órganos de alguien que ha matado a otras personas, aunque antes de convertirse en asesino se dijera de él que era un buen hombre? ¿Alguien querría recibir el pulmón, el hígado o el corazón de otro que ha quitado vidas? ¿Pasa algo por llevar dentro de ti el órgano de una persona que ha matado a otros?".

La presentadora de TVE, en el editorial de hoy miércoles, ha destacado que se trataba de "una opinión personal" y que sentía "que la cadena se vuelva a ver comprometida con una acción mía". A pesar de las disculpas, ha añadido que se sostiene en las preguntas que se hizo ante las cámaras. Así, mantiene que "no está demostrado científicamente que el alma no se transmita en un trasplante de órganos". De hecho ha recalcado que el otro día en 'La Vanguardia' una trasplantada de corazón afirmaba que sentía el alma de su donante.

Mariló Motero remató su discurso diciendo: "Soy donante, soy donante de todos mis órganos y me gustaría comprobar por mí misma eso de que el alma se transmite. No olvidemos que España es el país que está a la cabeza de los trasplantes de órganos. Salud y suerte".