El PSOE y sus muchas varas de medir

Resulta impresionante el cinismo de la plana mayor del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) que, desde la oposición, predica ahora con sonora vehemencia cuando fue incapaz de dar trigo cuando gobernaba. Ha vuelto a ocurrir a raíz de las tibias medidas adoptadas por el gobernante Partido Popular (PP) para edulcorar los vergonzosos desahucios que están dejando en la orfandad a muchas familias perdedoras de su vivienda, al no poder hacer frente a los pagos de la hipoteca. El PSOE dice ahora, con acierto, que el decreto de la derecha es un parche que no va a solucionar el grave problema del aumento de ejecuciones y desahucios. Pero se le olvida mencionar que los embargos se vienen produciendo sobre todo desde 2008, fecha en la que gobernaba con creces José Luis Rodríguez Zapatero. Las complicidades parlamentarias entre el PP y el PSOE con sede en la madrileña calle de Ferraz, y no sólo en este rubro, merecen ser glosadas en una antología sobre los despropósitos ideológicos en los que incurre a menudo la socialdemocracia ibérica. En el colmo de una alevosa desmemoria, se impone traer a colación las decenas de miles de desahucios que se llevaron a cabo durante el mandato de Rodríguez Zapatero sin que los que reclaman ahora justicia se alinearan realmente con los desposeídos. En su época, los socialistas facturaron el mismo “parche” que denuncian en el comunicado que adjunto. En ese momento, prefirieron voltearse después de marear la perdiz con un par de iniciativas mancas. El hiperbólico sentido del Estado del que suele alardear el PSOE para demostrar su madurez, constituye desde hace años su principal rémora como partido progresista.

Decreto Ley sobre dación en pago (Prensa-PSOE)

Madrid, 9 de marzo de 2012.- La Secretaria de Economía y Empleo del PSOE, Inmaculada Rodríguez-Piñero, denunció que el decreto ley sobre medidas de apoyo a hipotecados sin recursos, aprobado hoy por el Gobierno, no es más que un “parche” que “no va solucionar el grave problema del aumento de las ejecuciones y desahucios”, ya que “las condiciones para que los ciudadanos puedan acogerse a la fórmula de la dación en pago son muy restrictivas y, además, no es de obligado cumplimiento para los bancos, sino de carácter voluntario”.

“En definitiva,-añadió- el alcance de esta medida, anunciada a bombo y platillo por el Gobierno, va a ser mínimo, puesto que su incidencia depende de la buena voluntad de las entidades de crédito”.

A juicio de Rodríguez-Piñero, la propuesta del Gobierno con un Código de Buenas Prácticas para las entidades financieras en relación con los desahucios, “parece más un intento de lavar la imagen de los bancos, que una propuesta para solucionar un problema que cada vez afecta a más ciudadanos”.

En este sentido, apuntó que “las reformas a acometer en materia hipotecaria deben de articularse mediante normas imperativas y no sobre recomendaciones con espíritu únicamente voluntarista”.

Rodríguez-Piñero avanzó que el Partido Socialista presentará “una Proposición de Ley de insolvencia personal que aborde las situaciones de endeudamiento de las personas de una forma integral y que regule un reparto equilibrado de riesgos entre deudor y acreedor, manteniendo la seguridad en el tráfico mercantil y sin restringir o encarecer excesivamente el crédito”.

El objetivo de la propuesta en la que está trabajando el PSOE-explicó- es que “quien ha recibido un préstamo actuando de buena fe y se queda sin patrimonio ni ingresos  para hacer frente al pago, no pierda su vivienda”.

“El PSOE va hacer una propuesta integral sobre este asunto, porque la cuestión no solo es evitar que la gente tenga que seguir pagando, aún después de perder la casa, sino impedir que los hogares endeudados de buena fe, que no pueden hacer frente al pago de la hipoteca, pierdan la vivienda en la que residen”.