Bochornoso PSOE

Resulta patético y también indignante el espectáculo que está ofreciendo el tocado Partido Socialista Obrero Español (PSOE), mediante la publicación de manifiestos en los que unos y otros, todos ellos cómplices del naufragio, todos ellos líderes, respaldan o cuestionan entre líneas la gestión del ex presidente José Luis Rodríguez Zapatero aprovechando que las aguas bajan revueltas y aspirando todavía a más, sin haber rendido una sola cuenta por el estropicio causado en los últimos cuatro años. El pataleo elitista y carente de enjundia que ha surgido en el PSOE tras la renuncia desde el Gobierno y su entorno a algunas de las escasas señas de identidad que le quedaban al partido de Pablo Iglesias, contrasta con la rebelión mucho más auténtica y justificada de las bases socialistas que demandan una participación directa en elecciones primarias y un retorno a los orígenes, aunque estos estén contaminados por los sucesivos reciclajes de una formación mucho más cercana en estos momentos a la tercera vía del inefable laborista Tony Blair, que a la socialdemocracia de Rosa Luxemburgo. La refundación del PSOE urge. Y con ella la autocrítica a fondo y la revisión de postulados que desde la transición han ido alejando al partido socialista de la calle y de sus mejores manantiales ideológicos.