Evitan balconeo, por el momento...


El cerco judicial sobre Iñaki Urdangarin se está estrechando, según relata El Periódico de Cataluña que levantó la primicia sobre las supuestas irregularidades financieras del yerno del monarca español cuando presidía instituciones sin ánimo de lucro. A pesar de que el diario El País, con fuentes más que acreditadas, daba por hecho en su edición de este jueves que Urdangarin sería llamado a declarar en calidad de imputado a petición de la Fiscalía Anticorrupción, finalmente ha intervenido el matiz y se ha aplazado la comparecencia del ex jugador de balonmano. Barruntamos que en las últimas horas han sido muchas las presiones ejercidas por la Casa Real para desviar los focos justicieros, hasta que no se recaben pruebas más contundentes de la presunta malversación de fondos en la que habría incurrido Urdangarin, cuyo comportamiento empresarial y sus proverbiales ganancias han sido cuestionados en varias ocasiones. La Casa Real pesa y mucho en el organigrama estatal, y de ahí que una noticia que ayer se tenía por cierta, se haya convertido hoy en probable. Esperemos que la justicia no se deje intimidar por las heráldicas y actúe con diligencia y desinhibida, como lo haría contra cualquier otro ciudadano español que se encontrara bajo sospecha. Aunque nos tememos que la condición aristocrática del potencial imputado frenará los ímpetus iniciales y el desenlace será mucho más tibio de lo deseable. Blindaje obliga.

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