La UE sigue en la UVI

Efectivamente, los nuevos cargos de la UE tienen muy poco peso. Pero el problema de fondo no es una cuestión de carisma, sino de contenidos. Mientras los países que integran la UE no estén dispuestos a renunciar a una parte sustancial de su soberanía en aras de la navegación común, no habrá comunidad que prospere. Las competencias del Parlamento europeo son por lo demás escasas y en su mayoría irrelevantes, ya que el bacalao se sigue cortando realmente en las respectivas Cámaras nacionales. Falta pues voluntad comunitaria y de ahí que las instituciones europeas, cada vez más abigarradas, se mantengan en estado larvario y no prosperen. Resulta evidente que para contagiar a los ciudadanos de una mínima ilusión se necesita avanzar verdaderamente en materia de reparto y justicia social y en el levantamiento de economías con una dimensión más humana, menos tiburoneras vaya. Hasta ahora, sólo ha sido posible crear una Europa de varias velocidades, asimétrica, con avances visibles en materia financiera y monetaria que lindan con el neoliberalismo. Es imposible que Europa hable con una sola voz cuando nadie está dispuesto a delegar y, recordémoslo, son los ventrílocuos los que mandan, no los muñecos. La crítica de Cohn-Bendit procede, pero es insuficiente.

El copresidente del grupo de los verdes en la Eurocámara, Daniel Cohn-Bendit, afirmó hoy que Europa ha tocado fondo con la elección de dos políticos de "bajo perfil" como el primer ministro belga, Herman Van Rompuy y la comisaria de Comercio, la británica Catherine Ashton, para ocupar los nuevos altos cargos de la UE.
"Los líderes han proseguido su trabajo de debilitamiento de las instituciones europeos. Han confirmado su opción por un presidente de la Comisión débil (José Manuel Durao Barroso) eligiendo también a un presidente del Consejo insulso y a una Alta Representante de la Política Exterior insignificante", dijo Cohn-Bendit en un comunicado. "Europa toca fondo. La buena noticia es que a partir de ahora las cosas sólo pueden mejorar", resaltó.
Por su parte, la otra copresidenta del grupo verde, Rebecca Harms, afirmó que la elección de una mujer para uno de los altos cargos de la UE debe mucho a la presión de las eurodiputadas. "Los éxitos futuros de Catherine Ashton dependerán mucho de su capacidad de trabajar en estrecha cooperación con el Parlamento. Ella está más preparada que su predecesor, Javier Solana", dijo Harms.
"Herman van Rompuy será más un moderador que un líder del Consejo Europeo. Los dirigentes europeos tienen exactamente lo que querían: alguien que no les haga sombra", concluyó.

Comentarios